A mi Born (Ruta para madrileños)

Hace tiempo que debo una ruta por mi zona de tiendas favorita. Así que se la haré para Ana Brown, que fue la que inspiró que este blog fuera posible porque se le ocurrió pedir una ruta por Londres.
El punto de partida es Via Laietana con Argenteria. En general, se viene del Gòtic, gran zona pero con tiendas un poco tristes, de las que apenas cabe destacar el Tomo de Llibreteria y una de artesanía de la Amazonia en la sonora calle de las Trompetes de Jaume I.
Bajando por Llibreteria, hay otro hermoso nombre: Como agua para chocolate. Modelos de Josep Font bis, Andrea Morros, Antik Batik y otras marcas dignas de merecer. Lo mejor, sin embargo, son los zapatos. Más, en la tienda de al lado, con bolsos y complementos, de los mismos dueños.
El Paramita de enfrente es prescindible, si se viene de la capital, pero enlaza con la de Kukuxumuxu que hay llegando a la plaza.
Volviendo al lado del agua, un poco más abajo y haciendo esquina en la plaza, hay una tienda de ropa masculina innovadora. Y más allá, casi enfrente del Hoffman, la mejor tienda de teteras de BCN.
Ante Santa Maria del Mar, rendirse ante la arquitectura. No venden nada, pero es impagable. Allí habrá que decidir qué camino seguir.
A la izquierda, la tienda de Korres y, un poco más allá, escondida entre los rincones, una que venden algunos de los souvenires más originales de la ciudad, como las camisetas de Chachá.
Por el camino de la derecha, en cambio, se llega a la tocinería más famosa de Barcelona, célebre por sus butifarras de gustos variados, y a tu espalda, Bubo, una de las pastelerías más innovadoras, y más allá, la Vila-Viniteca de Quim Vila, la mejor tienda de vinos, con sucursal en copas y en delicatessen varias a lo largo de la calle Agullers.
Satisfecha la gula, no hay que pararse en la Vinya del Senyor, porque entonces se acaban las tiendas ;-), sobre todo si se pide la mandonguilla de foie.
En la plaza de los héroes catalanes, hace esquina Rafa Teja Atelier, pañuelos, foulares y bolsos de telas varias con un gusto esquisito. Hasta hace poco tenían un outlet intermitente en la calle de detrás. Más bolsitos monos en la tienda de al lado, y llegando a la esquina con Vidrieria, Atalanta Manufactura, más pañuelos, pero algo más kirsch.
Entrar por Vidrieria. Hay Tascon, Miró Jeans, Mandarina Duck, Anna Povo y Custo, más una tienda de bombones con alguna tentanción interesante. Parar en Custo y entrar en la plaza, justo enfrente de Cal Pep. Allí hay otra tienda de zapatos, que merece una parada. Hay Marc Jacobs y Dorotea, curiosa y afortunada combinación del mix local.
Ya estás en el Soho barcelonés. Sigue por Bonaire hasta el carrer del Rec. Hay un par de tiendas interesantes antes de llegar a Rec. Vale la pena la tienda de la esquina, Carmen nosequé, y la de al lado, la maravillosa La Comercial, donde venden Paul Smith e Isabel Marant, para cuando no están Londres o París a mano. Versión masculina justo enfrente, al lado de la tienda más oscura del barrio.
Toda la zona de Rec hasta el Born es una maravilla. Está también Boba, pero me gustan especialmente los de Colette? (la de la esquina con Esparteria), que tienen Chloe y Paul Joe, a precios de tales, pero que son puro glamour.
Y si aún no tienes bastante, y espero que me hayas resistido hasta aquí, cruza el paseo y entra en Flassaders.
Hay una tienda de comida italiana gloriosa, justo en la entrada, enfrente de Cortana, de lo mejor del diseño catalán que se creyó la historia de Balenciaga. Carísimo, pero el escaparate suele valer la pena.
Toda la calle también es otra joya. Hay tiendas de zapatos y complementos, y vale la pena seguirlas hasta llegar al Café de la Princesa, donde venden ropa de hombre y de mujer de Sand y Julie Sohn, además de complementos y trastos varios muy divertidos.
Desde allí, perderse por las callejuelas o volver los pasos hasta llegar al Born. E ir a celebrarlo al Gimlet con un Whisky sour, que es de lo mejorcito de Barcelona. Si hay hambre, parada previa en Sandwich and Co, con mural de Jordi Labanda cuando no lo conocía nadie. Y si apetece algo más consistente, el bar Rosal de la esquina hace un Pollo Mango Chutney de morirse.
Os quedará Montcada, con su Museo Picasso, el Barbier Muller y el Tèxtil, otra terraza estupenda con brownies para homenajear a mi amiga. :-) Evitar los días de verano, es sofocante.